Cuando vas contra Hacienda, pierdes.
Es injusto. Pero es así.
En todos estos años asesorando a empresarios, hay una cosa que me sigue sorprendiendo: la cantidad de decisiones fiscales que se toman tarde. O mal. O con una confianza ciega en que “ya se verá más adelante”.
Pues no. La planificación fiscal no es un lujo ni una tarea que puedas delegar sin criterio. Es una necesidad básica si tienes una empresa, si manejas capital, o si simplemente no quieres que el sistema decida por ti.
Aquí te comparto algunos consejos prácticos, desde la experiencia y sin fórmulas mágicas.
1. Reparte dividendos de forma ordenada
Hay algo básico que muchas empresas siguen sin aplicar: el reparto de dividendos funciona por tramos.
¿Qué significa eso? Que si vas sacando el dinero poco a poco, pagarás menos que si lo haces todo de golpe.
Es así de simple. Pero claro, para eso necesitas planificación y no actuar cuando ya estás con la venta encima.
2. Evita acumular demasiado en bienes raíces
Tener patrimonio inmobiliario suena bien… hasta que te das cuenta de que te inmoviliza.
Si el día de mañana quieres mover tu empresa a otro país (y con el contexto actual, no es una idea tan lejana), los bienes en raíces en España se convierten en una piedra atada al tobillo.
No puedes moverlos. No puedes adaptarte con agilidad. Y eso, en un entorno cambiante, es un problema.
3. Recuerda: el mundo es grande
Existen más de 200 países.
Y muchos de ellos tienen una fiscalidad más razonable que la nuestra.
No mirar más allá no es prudencia. Es ceguera fiscal.
No se trata de evasión, se trata de eficiencia. Se trata de sentido común. De ver qué opciones tienes sobre la mesa y decidir con cabeza.
4. Planifica. Porque si no lo haces tú, lo hará Hacienda
Y ya sabes lo que pasa cuando ellos deciden por ti.
Te puede salir caro, tarde y con poca capacidad de maniobra.
No se trata de hacer ingeniería fiscal ni de esconder nada. Se trata de ordenar, de anticiparse, de no regalar rentabilidad por desconocimiento.
¿Tienes una empresa y te estás planteando ordenar tu fiscalidad?
Podemos hablar. Escríbeme y vemos si puedo ayudarte a poner criterio antes de que lleguen los problemas.